¿Cuáles son los
efectos del tabaco en el cuerpo?
Los efectos del tabaco están más que demostrados y no son nada positivos. Cada año se producen cuatro millones de muertes por enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco, según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud.
En España los efectos del tabaco también se cobran sus víctimas. Cada día unas 150 personas mueren por efectos del tabaco según un estudio de la Sociedad Catalana de Pneumología (SOCAP) y la Asociación Española contra el Cáncer de Cataluña.
Es bien conocido que el tabaco causa cáncer de pulmón: aproximadamente el 90% de los casos de esta enfermedad se relacionan con el tabaco.
¿Qué más pasa en el cuerpo al fumar?
Aquí tienes un resumen con algunos de los efectos del tabaco más comunes:
- Menos oxígeno para los órganos
- Se dañan los vasos sanguíneos
- Paraliza los cilios respiratorios
- Ulceras
- Daña los ojos
- Te hace envejecer
- Problemas de fertilidad
- Impotencia
- Afecta negativamente en el salud de los niños
Menos oxígeno para los órganos
El monóxido de carbono reduce la cantidad de oxígeno que llega a los órganos. Esa disminución de oxígeno puede tener consecuencias graves como ataques cardíacos o derrames cerebrales. La nicotina también aumenta la frecuencia cardiaca, el ritmo respiratorio, la presión arterial y el flujo coronario.
Los efectos del tabaco disminuyen la elasticidad del tejido pulmonar. El humo del cigarrillo causa inflamación del aparato respiratorio e interfiere con la expansión y contracción normal de los pulmones.
El monóxido de carbono, el veneno invisible en el humo del cigarrillo, causa enfermedades cardiacas. El monóxido de carbono roba oxígeno de la sangre. Como consecuencia, los tejidos reciben menos oxígeno, el alimento necesario para mantenerse sanos.
Daños en vasos sanguíneos y vías respiratorias
Los alquitranes dañan y obstruyen los vasos sanguíneos. Esto puede agravar las infecciones, provocar enfermedades en la boca , la garganta, los pulmones y la vejiga.
El tabaquismo es una de las causas más comunes de la impotencia. Según un estudio, fumar un paquete de tabaco al día aumenta hasta en un 60% el riesgo de sufrir impotencia.
El tabaco también afecta a las vías respiratorias. La nicotina impide el movimiento de los cilios respiratorios, los diminutos pelos que cubren la parte interna de nuestros pulmones. Gracias a su movimiento en ondas transportan las partículas indeseadas a lo largo de la superficie del revestimiento mucoso. Así, los cilios respiratorios son responsables de ayudar en la tarea de filtrado del polvo y otras sustancias del aire inhalado.
Al fumar, la función de los cilios se va detoriando y por esto los fumadores contraen resfriados e infecciones respiratorias más fácilmente.
El humo del tabaco puede desencadenar un ataque de asma.
Úlceras, daños oculares y envejecimiento de la piel
Los fumadores son más susceptibles a sufrir úlceras gástricas y duodenales. La nicotina reduce los niveles de vitamina C y por esto las heridas tardan más en curarse.
El humo del cigarrillo, incluido el alquitrán, provoca alteraciones biológicas en el ojo lo que lleva a pérdida de visión en algunos fumadores.
Además, cada bocanada de humo de un cigarrillo contiene unos dos billones de radicales libres responsables de oxidación y envejecimiento prematuro de la piel. Si quieres lucir una imagen más joven lo mejor que puedes hacer es dejar de fumar.
Problemas de fertilidad
¿Eres mujer fumadoray tienes problemas para quedarte embarazada? Entonces deberías considerar seriamente dejar de fumar. Según un informe holandés publicado por la revista científica británica “Human Fertility” el tabaco tiene un efecto ‘devastador’ en la fertilidad.
El estudio se llevó a cabo entre 8.500 mujeres de veinte a cuarenta años que estaban sometidas en Holanda a tratamiento de fertilidad. Un cuarenta por ciento de ellas eran adictas al tabaco y habían fumado un mínimo de un cigarrillo al día durante el año anterior.
El estudio indica que un simple cigarrillo al día reduce las probabilidades de la mujer de quedarse embarazada y aumenta por el contrario las de sufrir un aborto.
Los investigadores llegaron a la conclusión de que el tabaco añade diez años a la edad reproductiva de la mujer, lo que significa que una fumadora de treinta años tiene los mismos problemas que una no fumadora a los cuarenta.